El Angulo Oscuro

D e m e    u n    P e n i q u e

jueves, diciembre 07, 2006

Desazón (por las mentiras que te dije...)

La verdad, no tenía tiempo de contarlas, pero aquel día, cuando salí cerrando la puerta, como siempre, con cuidado, me di cuenta que esa mañana no volvería. Esas mentiras, las pequeñas mentiras de todos los días, me habían consumido, me habían hecho ser otra persona distinta, distante y molesta. Como dije, aquel día que cerré la puerta, saliendo de casa, comprendí que no volvería...a veces divago... sí, ya recuerdo, abrí la puerta del portal (lo se, es redundante) y la primavera estaba ahí, llena de vida, pero yo tenía un peso dentro, que ni todas las primaveras del mundo podían cambiar...era el peso de la soledad que ni siquiera la compañía podía compensar, la de la soledad de saber lo que no es el mundo, sino un gris teatro donde las grises marionetas del destino se mueven movidas también por grises y descuidadas manos. Aquel día salí de la puerta, (sí, del portal dije) y camine, como siempre con paso presuroso por las calles. Un señor con el que me crucé, ya mayor, iba en dirección contraria a mi, me dijo: "yo antes iba así, corriendo como tú a todos los sitios... ahora ya no puedo..." yo no paré, pero recuerdo que sonreí, y seguí a paso rápido...por un momento olvidé lo gris del mundo, lo gris de las marionetas y lo gris de las manos que lo mueven todo. Pero luego recordé, que esa persona que se dirigió a mi, era yo mismo recordando los tiempos en los que corría a todos los sitios. No sé dónde iba, pero recuerdo esa luz de Primavera...quizá iba a comprar algo, no recuerdo...quizá iba o venía, sí...quizá venía. Lo malo cuando te da igual si vienes o si vas es que luego no recuerdas este tipo de cosas. Pero bueno, realmente todo da igual, porque las mentiras que te dije, esas mentiras, todas pesan en el aire, todas pesan alrededor mío. Todas ellas, más de cien, quizá doscientas, quizá mil, todas ellas me acompañan y van como cadenas a mi alrededor, haciendo que cada vez, mis pasos vayan más despacio... de todas formas, espero llegar al último puerto, en el que tú me esperas, para no tener que mentir más, porque cuando esté contigo, cuando llegue a verte, por fin romperás las cadenas de mis mentiras, y juntos vivieros una nueva vida para siempre...llegaré a casa, cuando llegue a ti, y ahora creo saber que me esperas, como siempre me has esperado, y si el destino lo quiere, pronto nos volveremos a ver...



Etiquetas: ,